Las palmeras son unas plantas con unas características únicas, tanto es así que son muy fáciles de reconocer. Pero además, tienen un valor ornamental muy alto, motivo por el cual a menudo se buscan especies que puedan estar dentro de las viviendas.
No te voy a mentir: no hay muchas que se adapten bien a las condiciones de las casas o pisos; así y todo, es relativamente sencillo decorar el hogar con alguno de los 7 tipos de palmeras de interior que te vamos a recomendar a continuación.
Cosas que has de saber
Antes de entrar de lleno en materia es muy importante que se tenga en cuenta que NO existen las palmeras de interior, como tampoco las plantas de interior . El motivo es que las plantas llevan viviendo en la Tierra más de 300 millones de años; en cambio los más antiguos restos fósiles de nuestra especie, Homo sapiens , que se han encontrado datan de hace ”tan solo” 350.000 años. Y, si tienes curiosidad, la jardinería la empezamos a desarrollar hacia el año 1500 a. C.
Hasta ese entonces, todas y cada una de las plantas vivían únicamente en el exterior, en sus hábitats. Hasta que no llegamos los humanos modernos y ‘domesticamos’ a algunas, no se utilizaron para decorar los hogares , sino que se cultivaban en primitivos huertos. En definitiva, lo que quiero dejar claro es que no hay que dejarse engañar por las etiquetas que hoy utilizan a menudo para vender más.
¿Qué tienen en común las palmeras ”de interior”?
Cuando hablamos de plantas, o en este caso de palmeras de interior nos referimos a una serie de especies que no pueden vivir en el exterior durante el invierno . Estas especies pueden variar de país en país, dependiendo del clima. Por ejemplo, la Howea forsteriana puede ser una ”palmera de interior” en una provincia donde hay heladas intensas, pero en la región mediterránea, con heladas suaves, se cultiva sin problemas en los jardines.
Tipos de palmeras para interior
Si quieres decorar tu hogar con palmeras, echa un vistazo a las que te recomendamos:
Archontophoenix
Las Archontophoenix son un género de palmeras espectacular que, si bien es cierto que alcanzan una altura de 20 a 30 metros, se pueden tener en macetas durante muchos, muchos años , e incluso diría toda su vida, ya que su tronco no supera los 30cm de grosor.
Les gusta bastante el agua, por lo que los riegos durante el verano han de ser frecuentes, pero en invierno se regarán 1 máximo 2 veces por semana.
Adonidia merrillii
Conocida como palmera de Navidad, o por su anterior nombre científico Veitchia merrillii , pues produce frutos rojos durante esas fechas, es una especie que crece hasta los 5-6 metros de altura , con un tronco delgado de unos 25cm de grosor. En macetas suele crecer lento, de manera que tenerla dentro de los hogares es una delicia 😉 .
Eso sí, es importante que se proteja de la luz directa, pues sus hojas se queman con facilidad. Los riegos han de ser frecuentes en verano, y moderados el resto del año.
Chamaedorea
Las Chamaedorea son las palmeras ”de interior” por excelencia. No suelen superar los 3 metros (excepto la C. costaricana , que llega a los 15m) de modo que son las ideales para cultivar en macetas. La más conocida es la C. elegans o palmera de salón, pero hay otras que también son fáciles de conseguir como la C. metallica , que tiene hojas bífidas de un precioso color azulado-grisáceo, o la C. seifrizii llamada palmera bambú por su parentesco con esas plantas.
Son palmeras de sombra, pero en interiores agradecen estar en habitaciones luminosas, y recibir riegos más o menos frecuentes.
Dypsis lutescens
La mal llamada areca (hay un género de palmeras tropicales que se llama así, puedes conocerlo pinchando aquí ), o palmera bambú, es una planta multicaule, es decir, de varios troncos, muy cultivada en interiores. En los viveros se venden macetas con múltiples ejemplares, los cuales a medida que crecen van produciendo nuevos tallos. Puede alcanzar una altura de hasta 6 metros, pero lo normal es que se quede entre los 1,5 y los 3 metros.
En casa ha de estar en una habitación luminosa, lejos de las corrientes de aire, y recibir agua unas 2 o 3 veces por semana en verano y algo menos el resto del año.
Howea forsteriana
Conocida también como kentia , es una preciosa especie unicaule (de un solo tronco) que alcanza una altura de 10 a 15 metros . Por su crecimiento lento, se cultiva en macetas sin dificultad, hasta incluso durante toda su vida pues su tronco no engrosa demasiado, solo unos 15cm.
En los jardines se tiene en semisombra o incluso en sombra pues la luz del sol quema sus hojas, pero en interior ha de estar en un sitio con mucha luz, pues de lo contrario perderá color. En cuanto al riego, se ha de regar unas 2 veces por semana en verano, y 1-2 a la semana el resto del año.
Licuala grandis
Conocida como licuala o licuala grande , es una palmera de crecimiento lento que alcanza una altura de hasta 3 metros , con un único tronco de unos 6 centímetros de grosor. Se puede tener en interiores luminosos, en habitaciones amplias.
Los riegos han de ser abundantes durante todo el año, pero en invierno se reducirán.
Phoenix roebelenii
Llamada palmera enana , es una planta muy elegante que crece hasta los 5 metros como máximo , pero no suele superar los 2 metros. Es, con diferencia, una especie excepcional para tener en interiores, pero necesita mucha luz, motivo por el cual se ha de colocar en patios interiores luminosos o en habitaciones en las que haya ventanas cristaleras por las que entre luz.
Si hablamos del riego, se ha de regar una o dos veces por semana. Resiste mejor la sequía que el encharcamiento.
Raphis excelsa
Conocida como palmerita china o rapis , es una especie troncos múltiples que alcanzan una altura de 4 a 5 metros . Sus hojas palmeadas y sus tallos finos hacen de ella una planta muy interesante para interiores, por ejemplo, queda perfecta en los salones luminosos.
El riego ha de ser frecuente en verano, pero el resto del año serán suficientes 1 o 2 riegos cada 10-15 días.
¿Qué te han parecido estas palmeras ”de interior”? 🙂