En el mundo hay diferentes tipos de suelos y cada uno de ellos posee características singulares a las que hay que prestarles atención en jardinería. El suelo determina las necesidades específicas de las plantas e incluso limita las especies cultivadas.
Pero esto no es lo único, los diferentes tipos de sueños también determinan las labores que tendremos que realizar puertas afuera pues si cultivamos plantas no aptas para las características de un suelo tendremos que realizar trabajos adicionales para adaptar el suelo a las necesidades de esa planta.
Suelos alcalinos
Dentro de los tipos de suelos existentes, hoy nos detendremos en uno que es muy frecuente encontrar: el suelo alcalino . Aquí hablamos de aquél suelo que es diametralmente opuesto al suelo ácido, es un suelo dulce al que se adaptan pocas plantas y por eso es preciso saber si en nuestro espacio verde disponemos de este suelo para así tomar los recaudos necesarios.
Los suelos alcalinos son algo traicioneros en tanto llevan a las plantas a sufrir de clorosis férrica, es decir a una deficiencia en el hierro, algo que se advierte porque las hojas se vuelven amarillas para luego caer.
Para establecer el PH del suelo sólo necesitas de un kit de medición del PH, que puedes conseguir en cualquier vivero o tienda de jardinería. Si el resultado es de 7 para arriba estás frente a un suelo alcalino pues 7 es un PH neutro, es decir un suelo neutro y debajo de eso y hasta -7 hablamos de un suelo cada vez más ácido.
En el caso de tener un suelo alcalino en el jardín, puedes cultivar f ucsias, zinnias, boj, alhelíes clematis, higueras, tulipanes y una planta de ajo pues estos cultivos se adaptan sin inconvenientes a estos suelos dulces.
Suelos salitrosos
¿Qué hay de los suelos salitroso s? Antes que nada, definamos cómo son. Este tipo de suelo se relaciona con la salindad del suelo , es decir la cantidad de sal que presentan. Es difícil que las plantas crezcan en suelos con una muy alta salinidad pues entonces las raíces no pueden absorber el agua, lo que lleva a que los bordes de las hojas se sequen y se vuelvan marrones.
Pero la buena noticia es que hay algunas pocas especies que pueden sobrevivir a los suelos salitrosos o con una salinidad más elevada que la media. Esto sucede con una variedad de árboles y arbustos como la acacia, el romero, el brezo, el laurel, el algarrobo, el ciprés, el olivo, el Granado y el eucalipto . Otros que puedes tener en cuenta son la palmera datilera, el palmito, la buganvilla, la pasionaria, el kalanchoe, los crisantemos, los conejitos y el geranio . ¿Y un extra bonus si te gustan las plantas aromáticas? La lavanda y la verbena .