
Lamentablemente, no todas las plantas pueden crecer igual de bien en todos los tipos de tierra. Por este motivo, a veces sus hojas empiezan a volverse cloróticas por la falta de algún mineral (normalmente hierro, pero también puede ser magnesio). Una vez que eso les pasa, veremos que los nervios se vuelven más visibles si cabe, pues la clorofila, es decir, la sustancia verde de las partes foliares de las plantas, se concentra sólo en ellos.
Si no se le aporta rápidamente el mineral que necesita, esa hoja terminará por marchitarse completamente hasta caer. Para evitarlo, una de las cosas que podemos hacer es echar un poco de sulfato de hierro a la tierra . De esta manera, se bajará el pH y las raíces podrán absorber todo lo que precisan para crecer.
¿Qué es el sulfato de hierro?

El sulfato de hierro es un compuesto químico de origen inorgánico que está formado a partir de hierro metálico y ácido sulfúrico. Dependiendo del estado de oxidación de dicho hierro, distinguimos:
Sulfato de hierro (II)
O sulfuro ferroso, es un compuesto obtenido a partir de la reacción entre hierro y azufre. Es de color azul-verdoso, y se suele utilizar mucho en jardinería para bajar el pH de la tierra , pero también con fines pedagógicos por ser una sustancia ferromagnética (puede ser atraída por imanes) y endotérmica (absorbe energía).
Sulfato de hierro (III)
Es un compuesto obtenido a partir de la reacción de hierro, azufre y oxígeno. De apariencia como de sal sólida, es usado como colorante y en medicina como astringente.
En jardinería no se usa.
¿Dónde comprar?
En los viveros y tiendas de jardinería a menudo podemos encontrar bolsitas con una especie de polvo de color verde manzana o bien gránulos marrones/blancos. Los primeros son los más idóneos para disolver en agua al ser partículas mucho más finas; además, tienen una eficacia más rápida que los segundos, los cuales se tienen que descomponer a medida que se riegue.
Si tienes dificultades para conseguirlo, puedes hacer clic aquí:
¿Cuándo y cómo se aplica?

En el agua
El sulfato de hierro se aplica cuando cultivamos plantas acidófilas (arces, camelias, azaleas, magnolias, entre otras) en tierras con un pH que es mayor a 6, y cuando usamos un agua de riego que tiene mucha cal para prevenir la aparición de clorosis. Así, durante todo el año tenemos que echar unos 3 gramos de sulfato por cada litro de agua , y regar con ella una vez al mes.
En el jardín
Añadiremos entre 35 y 50 gramos por metro cuadrado de tierra , si lo que queremos es bajar el pH de una tierra caliza. Aunque es importante tener muy en cuenta que para que sea realmente efectivo debemos de regar con un agua cuyo pH sea o neutro o ácido, pues si es alcalino ese pH de la tierra seguirá siendo alto, es decir, alcalino.
En macetas
Para las plantas en maceta se aconseja más usar sustratos para plantas ácidas (en venta aquí ) y regar con agua algo ácida . Por lo tanto, en este caso no hay que usar sulfato de hierro, sino que el agua es muy dura, con un pH superior a 6, se tiene que acidificar disolviendo el líquido de medio limón en 1l/agua.
Hay que ir comprobando el pH, por ejemplo con un medidor digital (en venta aquí ), ya que si baja de 4 tampoco sería bueno.
¿Se puede aplicar vía foliar?
Los productos de aplicación foliar tienen una eficacia mucho más rápida, ya que actúan directamente en una de las partes de las plantas más importantes: las hojas. Ellas, a través de sus poros, los absorben, sin tener que ‘esperar’ a que les llegue a través de los vasos de troncos y/o ramas.
Pero, ¿es buena idea aplicar el sulfato de hierro de esta manera? Para responder a esta pregunta toca diferenciar los quelatos de los complejos: los primeros es recomendable usarlos por vía radicular, mientras que los complejos serán los que apliquemos por vía foliar.
Quelato de hierro
El hierro quelatado, que es otro de los nombres que recibe, se usa principalmente para corregir carencias de hierro ; es decir, cuando ya hay síntomas de falta de este mineral o, lo que viene a ser lo mismo, cuando ya hay clorosis .
La dosis es de 30 a 50 gramos si son plantas en desarrollo, y de 50 a 100 gramos si son plantas grandes y adultas.
¿Qué función tiene el hierro para las plantas?
Las plantas necesitan de una gran variedad de nutrientes para crecer y estar bien, y el hierro es uno de ellos. Pese a que está considerado como micronutriente, ya que lo necesitan en menor grado que el nitrógeno o el fósforo por ejemplo, sin él tendrían muchos problemas, pues cumple con funciones muy importantes :
- Ayuda a producir energía
- Es esencial para la formación de la clorofila (el pigmento verde de las hojas y tallos)
- Reduce los nitratos y sulfatos
- Es constituyente de algunos pigmentos y enzimas
Su carencia causará el amarilleamiento de las hojas, un desarrollo más pobre en general, y por consiguiente, una planta más débil . Por este motivo, es necesario conocer el pH del sustrato o de la tierra y de saber si es adecuado para el tipo de planta que queremos cultivar, pues si es un pH muy alto las raíces no podrán acceder directamente al hierro, y ello a las acidófilas es algo que no les gustará.
Espero que estos consejos te sirvan para tener un jardín de ensueño 🙂 .