Me gusta hacer hijuelos con las plantas que encuentro atractivas. Hace unos días fui a casa de mi hermana y regresé con unos cuantos hijuelos que planeo plantar en estos días. Por el momento, están sumergidos en un pequeño recipiente con agua para así desarrollar mejor sus raíces pero en una semana o dos será el momento indicado para ubicarlas en una maceta.
En estos últimos días, he investigado sobre las hormonas de enraizamiento y quizá me atreva a usarlas por primera vez. ¿De qué se tratan? Pues no son otra cosa que hormonas de origen vegetal que favorece el desarrollo de raíces en los esquejes.
Enraizante natural
Conseguir hormonas de enraizamiento no es algo difícil pues es posible adquirirlas en viveros y tiendas especializadas aunque si lo tuyo son los procesos más naturales pues te recomiendo diseñar tu propio enraizante casero con un método eficaz que apela a los recursos de la naturaleza.
El elemento clave para conseguir el producto es el ácido salicílico, que proviene del sauce , un árbol muy popular. Bastarán unas siete ramas de sauce para crear el ácido. Elige aquéllas que estén tiernas y con brotes amarillentos.
Una vez obtenidas las ramas, hay que preparar una infusión colocando las ramas cortadas en pequeñas porciones en un litro de agua. Pero primero habrá que hervir el agua para luego sí, colocar las ramas. Luego de unos minutos se apaga el fuego y se deja reposar la mezcla durante una jornada de 24 horas.
Hay otra forma de preparar el ácido sin agua caliente pero en este caso es preciso dejar reposar las ramas en el agua durante una semana.
Cómo utilizar el producto
Una vez listo el enraizante natural hay que colarlo y luego guardarlo en un recipiente oscuro en la nevera, donde podrá permanecer en buenas condiciones durante un mes.
Para usarlo, puedes mojar los esquejes en el enraizante durante una noche o bien plantar el esqueje para luego regar con la mezcla los dos días siguientes.