Los guisantes son unas de las verduras más consumidas, y unas de las más fáciles de cultivar. Las semillas tan sólo necesitan humedad para germinar, algo que harán en cuestión de pocos días. Además, tienen un ritmo de crecimiento muy rápido, tanto es así que sus frutos estarán listos para ser recogidos a los dos o tres meses de su siembra.
Así pues, si tienes ganas de cultivar una planta apta para principiantes, empieza con ellos. Sigue leyendo para saber cómo y cuándo se siembran los guisantes .
El mejor momento para sembrar guisantes es en otoño, aunque al ser una hierba de tan rápido crecimiento se puede sembrar sin problemas también en primavera . Para ello, lo que tenemos que hacer es preparar el terreno del huerto, quitándole las piedras y las hierbas silvestres que puedan estar creciendo. De esta manera, las plántulas podrán crecer y desarrollarse correctamente.
A continuación, procederemos a sembrar las semillas en hileras dejando unos 50cm de separación y cubriéndolas con una capa de tierra de unos 3-4cm . En el caso de que hayamos sembrado variedades de enrame, tenemos que ponerle un soporte para que puedan trepar, como cañas, tutores o varillas de hierro.
Una vez que estén sembrados, los regaremos bien poniendo en marcha el sistema de riego por goteo. Manteniendo la tierra siempre húmeda (pero no encharcada), conseguiremos que las semillas germinen en un plazo máximo de una semana , que será el momento en el que podremos empezar a abonarlos echándoles alrededor una capa de 2-3cm de grosor de abonos orgánicos, como humus de lombriz o estiércol de caballo por ejemplo.
Así, podrán crecer sanos y fuertes hasta el momento de su recolección, que será unas 12-14 semanas después de su siembra . Como vemos, es muy poco el tiempo que tendremos que esperar para poder degustarlos 😉 .
Buena siembra.