Si vives en una zona sin heladas y buscas un árbol de rápido crecimiento que tolere la sal y que además produzca flores muy decorativas… te recomendamos al copey . No solo es precioso sino que es de esas plantas que proporcionan una muy agradable sombra.
¿Te gustaría conocerlo? Pues no lo dudes: a continuación te diré cómo tenerlo perfecto . 🙂
Origen y características
Nuestro protagonista es un árbol semi-epífito (puede crecer como trepadora dependiendo de las condiciones del hábitat) perennifolio cuyo nombre científico es Clusia rosea (antes Clusia major ) que popularmente se le conoce como copey o mamey silvestre. Se trata de una planta endémica del Caribe, Bahamas y de las Indias Occidentales que alcanza una altura de entre los 5 y, a veces, los 20 metros . Sus hojas son ovadas, anchas, de 6-18cm x 6-12cm, gruesas, con los márgenes lisos, de color verde oscuro en el haz y más claro por el envés.
Las flores miden de 7 a 10cm de diámetro , y están compuestas por 7 pétalos de color rosado a blanco. Los frutos son redondos, de 9cm de diámetro, y tienen la pulpa anaranjada que encanta a las aves.
Es una especie amenazada por pérdida de hábitat.
¿Cuáles son sus cuidados?
Si quieres tener un ejemplar, te recomendamos proporcionarle los siguientes cuidados:
- Ubicación : exterior, en semisombra.
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Tierra
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- Maceta: sustrato de cultivo universal mezclado con un 30% de perlita. Es importante saber que si se cultiva en recipiente su altura no sobrepasará los 2m.
- Jardín: fértil, con buen drenaje. También tolera la sal.
- Riego : frecuente, hay que evitar que se seque la tierra. En épocas frías hay que disminuir la frecuencia de riegos.
- Abonado : abonar durante toda la temporada de crecimiento (meses cálidos) con abonos ecológicos .
- Época de plantación : en primavera.
- Rusticidad : no soporta el frío ni las heladas. La temperatura mínima que soporta es de 10ºC.
¿Conocías al copey?