Uno de los árboles preferidos por todos aquellos amantes de las plantas y la jardinería, son los bonsáis, ya que son una opción para conseguir una decoración encantadora, espectacular, pero al mismo tiempo muy natural. Por si no lo sabias, existen muchísimas especies de bonsáis, pero el día de hoy queremos hablarles un poco acerca del bonsái tamarindo, de origen africano y que hoy en día se cultiva en casi todos los lugares del mundo, sobretodo donde se goza un clima tropical y subtropical todo el año.
Estos árboles, son de hoja perenne y tiene la corteza delgada, rugosa y de un color oscuro negruzco. En el momento en que le empiezan a salir las flores, estas se agrupan en racimos muy delgados de color amarillo. Como cualquier otra planta y arbusto, es importante que tengas en cuenta sus cuidados para que puedas tenerlo en casa de la mejor manera posible. Así que presta mucha atención y manos a la obra.
Primero que todo la iluminación será muy importante, ya que necesitarás mucha luz, tanto natural como artificial. Obviamente el arbusto preferirá la luz natural, así que si la tienes en interior preocupar ponerla cerca de una ventana, cuidando que no le den los rayos directos del sol, para evitar que se quemen sus hojas o que se dañen las ramas. También deberás cuidar la temperatura, ya que estos bonsáis son de climas tropical, así que si vives en una zona fría, te recomiendo que las mantengas en el interior de tu hogar o en un invernadero cálido.
El riego también será muy importante, por lo que te recomiendo que debes dejar que se seque el sustrato entre riego y riego, pero no debes dejar que pase mucho tiempo seco, por lo que lo ideal será que siempre tenga humedad suficiente pero permitiendo eso si, que se seque un poco para que se puedan aprovechar todas las propiedades del suelo.
