Cómo instalar césped artificial

¿Por qué renunciar al verde del césped en una terraza o en las zonas difíciles del jardín? El césped artificial ofrece una buena solución allí donde la hierba natural no puede crecer porque no hay suelo, abunda la sombra, se quema con los químicos de la piscina, o el trazado es complicado para la siega... Los de calidad imitan cada vez mejor a los de verdad y son sencillos de instalar.

Los céspedes artificiales de calidad se parecen mucho a los naturales gracias a sus filamentos de tres tonos distintos de verde y uno de marrón, su espesor y su altura.

Si el césped natural es un ávido consumidor de agua, al que además hay que segar a menudo y brindar una serie de cuidados a lo largo del año, el artificial no se riega y apenas exige mantenimiento. Pero, además, se puede instalar en zonas donde el de verdad lo tiene difícil: áreas muy umbrías, el entorno de la piscina, donde el cloro produce decoloraciones y quemaduras, pendientes y rincones donde es difícil pasar el cortacésped.

El césped artificial permite disfrutar de un tacto de hierba en el suelo de la terraza, el ático o el balcón, donde es muy fácil instalarlo.
Pero también —y en esto no tiene rival— permite disfrutar de un tacto de hierba en el suelo de la terraza, el ático o el balcón, donde es muy fácil instalarlo: basta con limpiar la superficie y colocar un tejido drenante para que fluya el agua de la lluvia, y proceder a continuación según los pasos que indicamos más abajo, a partir del punto 5.

Fibras de colores

El césped artificial consiste básicamente en filamentos de plástico cosidos a una malla de drenaje. En tu centro de jardinería encontrarás muchas calidades: algunos ofrecen un aspecto muy natural gracias a su fabricación con hilos de distintos colores, incluso rizados y lisos. Los hay de distintas alturas, y algunos están especialmente creados para un uso intensivo. Se mantienen verdes muchos años. Pueden resistir el calor, los rayos UVA y el frío, aunque no conviene pisarlos cuando están cubiertos de escarcha.

INSTALAR CÉSPED ARTIFICIAL PASO A PASO

Fíjate en las ilustraciones de la derecha.

Cómo preparar del terreno

• Paso 1.

Remoja la zona para retirar la capa vegetal hasta una profundidad de unos 7-9 centímetros. Para eliminar la vegetación existente utiliza, si es necesario, un herbicida (pide en tu centro de jardinería que te aconsejen). A continuación, elimina las raíces, piedras y terrones.

• Paso 2.

Nivela el terreno aplanándolo para obtener una superficie homogénea y compacta.

• Paso 3.

Sobre la superficie bien lisa, extiende un tejido antihierbas permeable como capa de separación que impedirá el crecimiento de malas hierbas.

• Paso 4.

Solo en situaciones especiales, donde sea necesario un perfecto drenaje del agua, necesitarás extender una capa de grava encima del tejido antihierbas.

Cómo colocar el césped

Los pasos que siguen son comunes a la instalación sobre tierra o pavimento.

• Paso 5.

En el perímetro de la superficie ya cubierta con la malla antihierbas pega banda adhesiva de doble cara. Te servirá para fijar los extremos de los tramos que vayas cortando de los rollos.

• Paso 6.

A partir del punto de inicio, extiende el rollo de césped artificial y aplana los pliegues. Corta cada tramo del largo necesario. Enrolla el borde unos 50 centímetros para aplicar la banda adhesiva de doble cara. Verifica que las fibras de los distintos tramos vayan en la misma dirección y que el encaje sea perfecto. Para evitar desgarrones y para que las juntas queden invisibles levanta los bordes y pégalos al suelo con la banda adhesiva (en la imagen).

• Paso 7.

Espera 24 horas para asegurarte de que el césped ha quedado bien pegado. Pasa el rastrillo a contrapelo de las hojitas del césped para levantarlos.

• Paso 8.

Algunos céspedes artificiales que se instalan en los jardines (los que no tienen flecos rizados) necesitan una carga de arena de sílice para ganar peso, estabilidad y frescor. La arena se distribuye con el rastrillo por encima del césped. Los fabricantes indican la cantidad necesaria según el modelo. En áticos, terrazas y el entorno de la piscina, el césped no requiere carga de arena de sílice.

Muy fácil de mantener

Para limpiar de hojas u otros residuos el césped artificial se puede emplear un rastrillo, una escoba o un aspirador-soplador. Si no llueve, para mantenerlo limpio de polvo y refrescarlo basta con lavarlo de tiempo en tiempo con la ayuda de una manguera. En caso de necesidad, incluso se puede utilizar un detergente neutro, es decir, sin ingredientes abrasivos. Es importante barrer periódicamente los céspedes artificiales que llevan carga de arena de sílice para que las partículas se redistribuyan por toda la superficie y las fibras se mantengan levantadas. En algunos casos habrá que reponer la arena periódicamente puesto que las lluvias y el viento la van eliminando.

Girtena (Tenax)

Césped artificial, ¿por qué no?,


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