Hay tres factores principales a tener en cuenta a la hora de cultivar suculentas sanas: Suelo, agua y luz solar.
1. Suelo o sustrato
¿En qué tipo de suelo debería sembrar mis suculentas?
Las suculentas aman el suelo que drena bien. Cuando cultivas tus suculentas en macetas, puedes usar mezclas especiales de sustrato para suculentas y cactus que venden en tiendas, viveros o sitios online. El contenedor en el que estás plantando debe tener un orificio de drenaje, sin embargo, hay personas a las que le gusta hacer crecer sus suculentas en tazas, pocillos y otros contenedores que no tienen hueco de drenaje. En estos casos, es recomendable agregar al fondo, antes del sustrato, piedras o guijarros, también podrías mezclar un poco de arena con el sustrato para ayudar con los problemas de drenaje.
Al plantar en el jardín, asegúrese de que el área drene bien y no esté en un lugar que esté permanentemente húmedo. Durante los periodos secos de verano, el suelo se seca rápido. Si sientes que tu suelo no retiene el agua el tiempo suficiente, puedes mezclarlo con un poco de tierra para macetas para aumentar la retención de agua a tu gusto.
2. Riego
¿Cuánto y cuándo debería regar mis suculentas?
Si bien es cierto que las plantas suculentas pueden pasar largos períodos de tiempo sin regarse, pueden morir o dejar de crecer saludablemente en una situación de sequía. La recomendación en términos generales es regar bien a fondo cada vez y permitir que el suelo se seque ligeramente entre riegos. Otro tip que puede ayudar con el riego es que cuanto más gruesas son las hojas de una suculenta, menos agua necesita.
Las suculentas tienen un período de inactividad y, durante ese periodo no necesitan tanta agua. Como están inactivas, no están creciendo y no consumen tanta agua.
2. Luz solar
En general, las suculentas crecen mejor con luz solar brillante pero indirecta, aunque hay ciertas excepciones dependiendo de la especie. Para evitar quemar e insolar sus plantas , manténgalas en un lugar donde tengan mucha sombra pero reciban la luz adecuada. Si sus plantas no reciben suficiente luz, pueden ponerse largas y estirarse hacia la luz .
Si sus plantas se estiran o se inclinan hacia la luz, puede moverlas lentamente a un lugar más brillante o rotar la maceta de vez en cuando para que sigan creciendo hacia arriba.