¿Sabías que hay muchas suculentas y cactus comestibles que pueden ser saludables y deliciosos para incluir en tu dieta? Probalemente, las ensaladas y las sopas no son de las primeras cosas que te vienen a la cabeza cuando ves una hermosa suculenta adornando la ventana o el comedor de tu hogar. Sin embargo, existe algunas variedades de estas hermosas plantas que pueden cautivar tu paladar.
Si eres amante de las suculentas y los cactus podría serte útil e interesante la siguiente lista:
Suculentas no cactáceas comestibles
Algunos ejemplos de especies suculentas comestibles son la Caralluma adscendens , Caralluma fimbriata y Caralluma edulis, consumidas como verduras en la India y el norte de África. Varias especies de las suculentas Agave son comestibles, como el Agave tequilana utilizado para la producción de tequila.
Las hojas de todas las especies de Sedum son comestibles. La textura crujiente y el suave sabor a pimienta de sus hojas las convierten en una adición suculenta para ensaladas y sopas. Deben consumirse con moderación, algunas comidas en grandes cantidades pueden causar indigestión.
Una suculenta de buen sabor es la Portulaca oleracea, conocida popularmente como verdolaga, es una planta anual suculenta de la familia Portulacaceae, de bajo crecimiento con tallos rojizos y racimos de hojas pequeñas, ovaladas y de color verde oscuro. Si bien en algunas regiones es considerada como maleza, en otras se le cataloga de verdura. Se tiene registro de su consumo alimenticio desde la Antigua Grecia. Tiene un sabor ligeramente ácido y salado y se consume en gran parte de Europa, Oriente Medio, Asia y México.
Los tallos, hojas y capullos de la Portulaca oleracea son todos comestibles. Se puede consumir fresca como ensalada, salteada o cocinada como la espinaca, y debido a su calidad mucilaginosa también se usa para sopas y guisos.
Cactus Comestibles
Todos los frutos de un verdadero cactus son seguros para comer, aunque algunos pueden saber mejor que otros. Algunos saben mejor cocinados, otros pelados o simplemente quitándole las espinas. Y por supuesto, existen gustos diversos y variados. Lo recomendable es que pruebes bien que es un cactus y te cerciores que no sufras de alergia a ese tipo en específico.
La elegibilidad del cactus comestible dependerá de lo que pretendas realizar y de lo que quieras tener en tu jardín. Muchos cactus comestibles pertenecen a las más de doscientas especies de Opuntia, también conocidas como Nopales, Nopalitos, o Cactus Pera.
Las hojas y el fruto (o las tunas) de todas las Opuntia son comestibles. Podrás identificarlas por su forma ovalada, y sus hojas sueltas como paletas, cubiertas de espinas pequeñas. Los nopalitos son las paletas comestibles de la tuna y son populares en los platillos mexicanos tradicionales, desde sopas hasta burritos para el desayuno.
El cactus de la pera espinosa (Opuntia ficus-indica) es el más famoso y amado de los cactus comestibles. También conocido como el hijo indio, tiene hojas y frutas de buen sabor y viene siendo un alimento básico de muchos platos en Centroamérica y el suroeste de los EEUU. Ha sido introducido en países como Australia, el norte de África y las islas Galápagos.
Las Opuntias son bastante tolerantes al frío, y en el jardín comestible tiene múltiples usos: hacen excelente barreras de cobertura, y pueden convertirse en una pieza central de los jardines de roca u otros paisajes áridos.
El Saguaro (Carnegia gigantea), el símbolo del desierto del suroeste de EEUU, tiene una fruta comestible cuando está madura, lo cual puede llevar décadas.
El Stenocereus thurberi, o Pitahaya, Etcho o Echo, es parecido al Saguaro, pero más pequeño y con brazos que normalmente crecen en la base de la planta, en lugar de más arriba en el tronco principal. Tiene flores de lavanda y fruta roja conocida como Pitahaya Dulce, aproximadamente del tamaño de una pelota de golf. Es monumento nacional en Arizona.
La fruta del cactus barril se puede recoger y comer cruda, tiene la ventaja de no poseer espinas. Sus flores y sus brotes son también comestibles. La Pitahaya roja, Pitaya dulce, o Fruto del dragón, es un cactus con hojas carnudas y frutos rojos o amarillos brillantes con un centro rojo y negro (o blanco), de semillas crujientes con un alto valor nutricional. La planta tiene flores blancas grandes, fragantes que florecen solo de noche.
Muchos frutos de los cactus son llamados Pitaya, como es el caso del cactus peruano de manzana (Cereus repandes), por ejemplo. Otros grupos comestibles son la especie de Epiphyllum o Cactus orquídea, de frutos no tan grandes, pero sí con flores imponentes.
Al igual que con todas las plantas comestibles, es importante utilizar métodos de identificación correctos y asegurarse de que todo lo que piense comer generalmente se considere seguro para su consumo. También es importante tomar en cuenta de que cada persona pueden reaccionar de manera diferente a ciertas plantas.