Si bien la mayoría de las suculentas no necesitan podarse, algunos tipos de ramificaciones pueden beneficiarse de un ligero ajuste para mantener su tamaño y forma.
Les ofrecemos algunos tips para podar suculentas y así puedan prosperar en una cama de jardín u otro recipiente.
Instrucciones para podar suculentas
Examine las hojas del tallo que va a podar para determinar dónde debe cortar. Encuentre una hoja o nudo de hoja que apunte a la dirección en que desea que el tallo crezca, luego corte justo encima de este punto. El nuevo crecimiento en el punto de poda se ramificará en la dirección del nudo foliar.
Corte a través del tallo a media pulgada (1,2 cm) de la hoja o nudo deseado. Haga el corte en un ángulo de 45 grados con un cuchillo limpio y afilado.
Retire hasta un tercio de la longitud de cada tallo a podar. Dependiendo de las variedades de suculentas, varía la longitud de cada tallo podado para darle a la planta un mejor atractivo visual.
Recomendaciones para podar suculentas
Pode las suculentas al principio de la primavera, justo antes de que comience el nuevo crecimiento. En cuanto a sus variedades de floración, pódelas después de la floración o durante la temporada de invierno cuando se encuentran latentes.
Las podas de las suculentas pueden arraigarse y crecer en nuevas plantas. Para esto, deberá plantar los esquejes en una maceta de suelo húmedo y mantenerlo húmedo hasta que las raíces de la corteza muestre signos de nuevo crecimiento.
Puede utilizar un set de herramientas ideales para podas y transplantes como estas.
Algunas suculentas, como la Euphorbia, producen una savia irritante. Se recomienda, como precaución, usar guantes al podar las suculentas y así proteger su piel.