Perfumes de invierno en el jardín (1ª parte)
Asociamos el perfume de las flores a la primavera y el verano, pero también el invierno puede sorprendernos con fragantes floraciones en el jardín y la terraza. No toda la naturaleza reposa en esta época del año. Muchos arbustos esperan los días más fríos para abrir sus flores y difundir su aroma. ¡Disfrútalos!
Las flores del hamamelis o avellano mágico (izquierda) se abren entre diciembre y marzo sobre las ramas desnudas. Uno de los perfumes de invierno más deliciosos emanan de las flores traslúcidas del Chimonanthus praecox (derecha). Fotos: Henna K, OzzzkAlgunos arbustos aguardan los días más fríos del año para abrir sus flores y difundir su perfume. Otros se comportan como verdaderos heraldos de la primavera y empiezan a florecer en febrero. Los hamamelis, la exquisita Edgeworthia chrysantha, el calicanto de invierno (Chimonanthus praecox o Calycanthus praecox) con sus flores traslúcidas, el Viburnum x bodnantense, las rosadas daphnes y las fragantes sarcococcas son habituales en los jardines de invierno de los grandes parques.
La intención es sumar una floración, que además es olorosa, a los ritmos del jardín y la búsqueda de variación estacional y disfrute a lo largo de todo el año.
La intención es sumar una floración, que además es olorosa, a los ritmos del jardín y la búsqueda de variación estacional y disfrute a lo largo de todo el año.
La intención es sumar una floración, que además es olorosa, a los ritmos del jardín y la búsqueda de variación estacional y disfrute a lo largo de todo el año.
La intención es sumar una floración, que además es olorosa, a los ritmos del jardín y la búsqueda de variación estacional y disfrute a lo largo de todo el año.
La intención es sumar una floración, que además es olorosa, a los ritmos del jardín y la búsqueda de variación estacional y disfrute a lo largo de todo el año.
La intención es sumar una floración, que además es olorosa, a los ritmos del jardín y la búsqueda de variación estacional y disfrute a lo largo de todo el año.
Sus flores asoman cuando los cornejos enseñan sus varas rojas y amarillas, las espigas secas de las gramíneas capturan la luz invernal y despuntan los galanthus, crocus y otras bulbosas tempraneras. También hay flores perfumadas para los jardines de sombra, a cargo de las sarcococcas, ideales para mezclar con helechos y liriopes en las zonas más umbrías del jardín. La intención, en definitiva, es sumar una floración, que además es olorosa, a los ritmos del jardín y la búsqueda de variación estacional y disfrute a lo largo de todo el año.
Todos estos arbustos, así como los progenitores del Viburnum x bodnantense, provienen del Lejano Oriente, especialmente de los bosques de caducifolias de China, la cadena del Himalaya y Japón. Demandan escasos cuidados, por lo tanto son ideales para los jardines de bajo mantenimiento. Tienen gran tolerancia al frío, son de lento crecimiento y no necesitan poda, salvo para suprimir la madera muerta. No suelen sufrir plagas o enfermedades, excepto la pudrición de la raíz por exceso de agua en el sustrato.
DE HOJA CADUCA
Hamamelis mollis
Hamamelis
x
intermedia
,
Pleno sol / Semisombra
-20º (zonas 6-9)
Flor: Diciembre-Marzo
↕ 1,50-2 m ↔ 1,50-2m
Las perfumadas flores en forma de araña o desflecados pompones del avellano mágico se abren pegadas a las ramas desnudas (son axilares) iluminándolas con colores solares: amarillos y anaranjados con la base roja, y una buena variedad de rojos vivos en los Hamamelis x intermedia. Son nectaríferas, por lo tanto también contribuyen a alimentar a los polinizadores. En otoño, el follaje se torna amarillo brillante, o incluso anaranjado y rojo, antes de caer. Estos arbustos crecen lentamente pero pueden alcanzar hasta ocho metros de altura según el cultivar. Entre los hamamelis de flores amarillas en sus distintas tonalidades destacan ‘Wisley Supreme’*, ‘Barmstedt Gold’*, ‘Pallida’*, ‘Vesna’*, ‘Arnold Promise’*. Entre los de flores anaranjadas, ‘Jelena’*, con matices cobrizos, y entre los de flores rojas, ‘Diane’*. Los hamamelis también se utilizan como flor cortada.
Cultivo:
Requieren un lugar soleado para florecer abundantemente; en sombra no florecen. Para que los botones no sufran daños es importante resguardarlos del viento y el frío intenso. Sufre con la sequedad ambiental. El sustrato ha de ser ligero, bien drenado y fresco (con cierto grado de humedad); puede ser neutro o ácido, nunca calizo. Acolchar el sustrato es beneficioso.
Edgeworthia chrysantha
Pleno sol
-15º (zonas 7-10)
Flor: Feb-Marzo
↕ 1-2 m ↔ 1-2 m
Este arbusto de origen chino anticipa la primavera con una larga y perfumada floración en forma de abundantes semipompones antes de emitir las hojas. Las inflorescencias tienen unos 5 cm de diámetro y están formadas por varias decenas de florecillas tubulares blancas que se abren dejando ver cuatro lóbulos amarillos (o de un bello rojo anaranjado en variedades como la ‘Red Dragon’); son nectaríferas y su aroma recuerda ligeramente al clavo de olor. Las plantas se caracterizan por una estructura muy ramificada y redondeada, que en verano desaparece tras un tupido follaje formado por hojas largas (8-13 cm) y oblongas de aspecto tropical. Sin embargo, la Edgeworthia chrysantha inicia su protagonismo en el jardín al caer el follaje en otoño y quedar a la vista los botones florales, aterciopelados pompones plateados que comienzan a formarse a finales del verano. En Japón, donde está naturalizada, recibe el nombre de mitsumata, que se aplica por extensión al papel de excelente calidad que se obtiene de sus fibras.
Cultivo:
Es un arbusto de sotobosque, de modo que requiere una situación en sombra ligera o semisombra, al resguardo del sol más intenso, especialmente el de la tarde. Tolera mal los veranos demasiado secos y calientes. Su sustrato ideal es profundo, rico en humus, húmedo pero bien drenado; sufre con el exceso de cal en el suelo. Agradece que se le acolche el pie para protegerlo tanto del frío como del calor y mantener la humedad.
Chimonanthus
Calycanthus praecox
o
Pleno sol
-34º (zonas 4-9)
Flor: Diciembre-Marzo
↕ 2-4 m ↔ 1,50-2,50 m
De las pequeñas flores que adornan las ramas desnudas del macasar o calicanto de invierno emana uno de los perfumes más intensos del jardín en los meses más fríos del año. Las corolas parecen de cera, con los tépalos interiores de color granate y los exteriores amarillos y traslúcidos. En el cultivar ‘Grandiflorus’* son más grandes que en la especie tipo; en el ‘Luteus’*, más cerradas y solo amarillas. Tras la floración emite hojas satinadas simples, ovaladas y acabadas en punta, de cinco a 15 e incluso 20 centímetros de largo en los cultivares mencionados. Es un arbusto ideal para jardines informales.
Cultivo:
A pleno sol florece en abundancia, pero debe situarse en un lugar protegido del frío y el viento. Admite cualquier tipo de sustrato mientras sea húmedo, ligero y con buen drenaje; tiene predilección por los alcalinos. El riego ha de ser frecuente en verano y moderado el resto del año. Consulta la ficha .
Viburnum
x
bodnantense
Sol o semisombra
-20º (zonas 6-8)
Flor: Noviembre-Abril
↕ 1,50-3 m ↔ 1-2,50 m
Son especialmente perfumadas las flores suavemente rosadas y blancas de los cultivares ‘Dawn’* y ‘Charles Lamont’*, los más habituales en los jardines. Surgen sobre las ramas desnudas en forma de densos ramilletes de botones de color rosa vivo, que se abren desde mediados del otoño a mediados de la primavera. Estos esbeltos y un tanto desgarbados viburnos ofrecen varios momentos de interés a lo largo del año: sus hojas son de tonos bronce al brotar, verdes en verano y se vuelven anaranjadas y rojizas en otoño antes de caer; las flores dan paso a bayas rojas que viran al negro (son tóxicas).
Cultivo:
Viven bien a pleno sol o en sombra ligera (‘Charles Lamont’ incluso en sombra) en suelos profundos y frescos, moderadamente fértiles, ricos en humus y bien drenados; es importante evitar los secos o muy húmedos. En zonas de heladas o mucho viento es imprescindible plantarlos en un sitio protegido.
* Cuenta con el Garden Merit Award de la Royal Horticultural Society por sus buenas cualidades jardineras.