Flores de bulbos por Navidades

Antes de que acabe el otoño, jacintos y amarilis se convierten en los protagonistas de una decoración viva llena de encanto. Estos bulbos forzados para florecer antes de tiempo solo se pueden cultivar dentro de casa.

Jacintos de varios colores en macetas rústicas. Resultan perfectos también en tiestos clásicos y modernos. Abajo, jacintos cultivados en hidrogel dentro de unos recipientes muy originales.

En los últimos años, jacintos (Hyacinthus orientalis) y amarilis (Hippeastrum spp.) han cobrado gran protagonismo como plantas de flor de interior en los meses más fríos del año. En los centros de jardinería encontrarás a partir de octubre sus bulbos forzados, es decir, sometidos a determinadas condiciones de frío y luz para conseguir una floración precoz. Así, especies que naturalmente florecen en primavera se adelantan para dar juego a decoraciones de lo más atractivas, incluso navideñas.

A partir de octubre verás bulbos forzados de jacintos y amarilis en tu centro de jardinería. Elige los que se vean compactos y libres de estrías, manchas o heridas.
Los jacintos, en especial, con sus innumerables cultivares de perfumadas inflorescencias en racimo azules, moradas, blancas, rosadas e incluso amarillas, pueden llenar de encanto cualquier rincón, ya sea en solitario o en grupos. Hasta los años ochenta, en que comenzaron a popularizarse las poinsettias, se usaban los jacintos de flor pequeña blanca como planta típica de Navidad (en Cataluña se llamaban nadales); ahora los encontrarás como paperwhites.

Los amarilis

Los amarilis y sus numerosos híbridos tampoco se quedan atrás con sus espectaculares flores en forma de trompeta rojas, rojas con bandas blancas, rosadas o asalmonadas, que en los últimos años se han convertido en un bello adorno de Navidad. Estos grandes bulbos emiten sus esbeltas varas florales antes de que aparezcan sus largas hojas; cada vara produce entre dos y cuatro flores cuya corola puede alcanzar los 20 centímetros de diámetro. Lucen tanto en solitario como formando filas. Tanto los jacintos como los amarilis te aseguran flores a lo largo de varias semanas.

CÓMO CULTIVARLOS

• Cuándo comprarlos:

Ya en octubre verás bulbos forzados de jacintos y amarilis en tu centro de jardinería. Elige los que se vean más compactos y libres de estrías, manchas o heridas.

• El tiesto debe ser apenas mayor que el tamaño del bulbo.

No esperes a llevarlos a una maceta y recuerda que mientras más estrecheces pasen en ella, mejor: la planta se concentrará en emitir sus varas florales en vez de dedicar sus esfuerzos en colonizar el sustrato con sus raíces. Si el recipiente es grande planta varios bulbos en él. El tiesto debe tener agujero de drenaje para evitar la acumulación de agua en el fondo.

• Drenaje y sustrato:

Coloca una capa de guijarros en la base del tiesto para asegurar el drenaje, y rellénalo con un sustrato muy suelto en el caso de los jacintos, y humífero en el de los amarilis.

• Cómo plantarlos:

Los bulbos no se deben enterrar del todo. En el caso de los jacintos, deja un tercio por encima de la superficie del sustrato, y dos tercios en el de los amarilis. La yema siempre debe quedar hacia arriba.

• Mantenimiento:

Los bulbos forzados de jacintos que encontrarás en tu centro de jardinería ya mostrarán el racimo, de modo que cuando llegues a casa solo tienes que plantarlos y colocarlos en un ambiente luminoso, a 18- 19º; riégalos con agua templada preferiblemente, y no los abones. En el caso de los Hippeastrum, comienza regándolos poco y mantenlos en un lugar bien iluminado a unos 15-18º. Aumenta los riegos progresivamente a medida que las varas crezcan; no dejes que el sustrato se seque, pero tampoco lo encharques. Gira el tiesto regularmente para evitar que las varas se inclinen hacia la luz. Las temperaturas frescas ayudarán a que las flores duren más tiempo.

• Después de la floración:

Cuando las flores se hayan marchitado, corta las varas y continúa regando. Hay quien recomienda aplicar un fertilizante líquido equilibrado cada 7-10 días. Interrumpe el riego cuando las hojas empiecen a amarillear. Para dar descanso a los bulbos deja que el sustrato se seque y llévalos en su tiesto a un sitio fresco y oscuro durante un par de meses. Debes empezar a despertarles a mediados de octubre; solo deberás renovar la capa superior del sustrato. Se deben cambiar de tiesto cada dos o tres años.

Bulbos de primavera, ¡es hora de plantarlos!,


Contenidos relacionados