Euforbias para encender de amarillo los jardines
Cuando el invierno llega a su fin, el brillante amarillo limón de las euforbias mediterráneas irrumpe en los jardines todavía llenos de ramas desnudas. Una explosión de luz en contraste con el follaje verdeazul de unas vivaces perennifolias que aportan belleza, y algunas incluso estructura, todo el año.
Cuando está en flor, la Euphorbia characias subsp. wulfenii irradia una luminosidad excepcional. Foto: Locus AmoenusLas euforbias mediterráneas no son unas vivaces corrientes: no pierden la parte aérea y se mantienen verdes todo el año (con alguna excepción), pero además despiden el invierno con una vibrante floración amarillo limón cuando aún hay muy poco en flor, que dura hasta el final de la primavera.
Por la forma y el tamaño parecen arbustos o subarbustos. Los tallos son leñosos en la base y herbáceos donde surgen las hojas, generalmente lineares, carnosas y azuladas.
Por sus flores, pero también por su follaje glauco, estas euforbias mediterráneas son perfectas para combinar con romeros, lavandas, jaras, sédums, phlomis, gauras y gramíneas.
Por sus flores, pero también por su follaje glauco, estas euforbias mediterráneas son perfectas para combinar con romeros, lavandas, jaras, sédums, phlomis, gauras y gramíneas.
Por sus flores, pero también por su follaje glauco, estas euforbias mediterráneas son perfectas para combinar con romeros, lavandas, jaras, sédums, phlomis, gauras y gramíneas.
Por sus flores, pero también por su follaje glauco, estas euforbias mediterráneas son perfectas para combinar con romeros, lavandas, jaras, sédums, phlomis, gauras y gramíneas.
Por sus flores, pero también por su follaje glauco, estas euforbias mediterráneas son perfectas para combinar con romeros, lavandas, jaras, sédums, phlomis, gauras y gramíneas.
Por sus flores, pero también por su follaje glauco, estas euforbias mediterráneas son perfectas para combinar con romeros, lavandas, jaras, sédums, phlomis, gauras y gramíneas.
El color de su floración corre por cuenta de las brácteas, que forman esas pequeñas copas amarillas que se reúnen en racimos o umbelas. Albergan un ciato, un tipo de estructura floral exclusiva de las euforbias donde se hallan las verdaderas flores, rodeadas de glándulas nectaríferas verdes, rojas o púrpuras. Dan alimento a las abejas y mariposas y producen cápsulas con tres semillas.
Por sus flores, pero también por su follaje glauco, estas euforbias nativas del Mediterráneo son perfectas para combinar con romeros, lavandas, jaras, sédums, phlomis, gauras y gramíneas ornamentales, que pueden convivir con ellas en borduras, macizos, rocallas, taludes, lechos de grava... Son plantas rizomatosas de lento crecimiento que también lucen espléndidamente en grandes tiestos.
Gran tolerancia a la sequía
Estas plantas de fácil cultivo son óptimas para los jardines de bajo riego por su gran resistencia a la sequía una vez establecidas, y las plantaciones de costa. Adoran el sol y algunas admiten la sombra parcial. Aceptan cualquier suelo, pedregoso, pobre, incluso calizo, mientras sea ligero y drene bien. El riego ha de ser moderado. No suelen padecer plagas u hongos.
Las ramas que hayan florecido deben podarse al ras para que puedan desarrollarse con fuerza los brotes nuevos, que darán flor al siguiente año (son bianuales). Al podarlas o manipularlas es imprescindible usar guantes y gafas para proteger los ojos, dado el efecto cáustico de su savia, el látex blanco típico de las euforbias. Por eso mismo deben plantarse lejos de las zonas de juegos de los niños.
Euphorbia characias
Rusticidad: -12º (zonas 8-10) Código de sequía: 5/6 ↕ 60-80 cm ↔ 60-80 cm
Originaria del sur de Europa —es la lechetrezna macho o tártaga mayor española y la euforbia de las garrigas francesa—, incluidas las islas, pero también del norte de Marruecos. Luce brácteas amarillo verdoso con el ojo rojo oscuro casi negro de las glándulas nectaríferas. Se resiembra abundantemente. Ha dado pie a numerosos cultivares: ‘Humpty Dumpty’, compacto, ideal para macetas; ‘Glacier Blue’, de hojas con los márgenes blancos; ‘Tasmanian Tiger’*, con variegaciones en crema o blanco y brácteas blancas con nectarios amarillos, o ‘Silver Swan’, de follaje gris plateado.
Euphorbia characias
subsp.
wulfenii
Rusticidad: -12º (zonas 8-10) Código de sequía: 5/6 ↕ 80-100 cm ↔ 80-100 cm
Matas más altas y grandes racimos florales de una luminosidad excepcional —y olor a café— explican la popularidad de esta subespecie nativa del Mediterráneo oriental.
Euphorbia rigida*
Rusticidad: -17º (zonas 7-10) Código de sequía: 5/6 ↕ 40-50 cm ↔ 50-60 cm
Es una de las euforbias mediterráneas más atractivas gracias a sus matas redondeadas y sus hojas anchas y cortas de color azul plateado dispuestas en espiral a lo largo de los tallos. Florece bella y largamente, de enero a junio: las flores empiezan siendo de color amarillo brillante, a partir de abril adquieren tonalidades rosadas, y en mayo-junio se vuelven rojas. Tiene propiedades alelopáticas, por lo tanto reduce las tareas de escarda.
Euphorbia pithyusa
Rusticidad: -12º (zonas 8-10) Código de sequía: 5/6 ↕ 30 cm ↔ 40-50 cm
Forma pequeñas matas en forma de cojín y sus hojas son pequeñas, de color azul plateado. Florece más tarde que las demás —juniojulio— y sus florecillas verdosas ostentan nectarios anaranjados. Es de origen balear.
Euphorbia myrsinites*
Rusticidad: -17º (zonas 7-10) Código de sequía: 5/6 ↕ 20-30 cm ↔ 40-50 cm
Las matas son especialmente bonitas ya que las ramas surgen desde el centro de forma radial y reposan sobre el suelo. Las hojas son más anchas y planas que en las demás.
Euphorbia
x
martinii
Rusticidad: -12º (zonas 8-10) Código de sequía: 3/6 ↕ 60 cm ↔ 60 cm
Es un híbrido de Euphorbia characias y Euphorbia amygdaloides de follaje verde azulado y tallos de color rojo vivo; los brotes nuevos son púrpuras. Las brácteas, de color verde limón, lucen nectarios rojos. Ha dado origen a varios cultivares.
Euphorbia cyparissias
Rusticidad: -17º (zonas 7-10) Código de sequía: 3/6 ↕ 20-30 cm ↔ 1-2 m
A diferencia de las otras, esta euforbia rastrera de follaje muy fino (de ciprés) es caducifolia y, además, de bonita otoñada. Se extiende rápidamente como un manto cubresuelos y se suele usar en taludes contra la erosión. Puede comportarse como invasora. El cultivar ‘Tall Boy’ forma matas redondeadas de unos 40 cm de altura. Menos expansionista es ‘Clarice Howard’, de brotes nuevos violáceos.
*
Cuenta con el Garden Merit Award de la Royal Horticultural Society por sus buenas cualidades jardineras.