Estilosas zamioculcas
Estas exóticas plantas que apenas necesitan riego y cuidados, hacen valer todo su potencial ornamental como protagonistas de enero del Flower Council of Holland. El secreto: sacarles partido en combinación con tiestos y contenedores bien escogidos.
Las zamioculcas aportan estilo y verdor a este ambiente, colocadas en tiestos rústicos.Las rotundas líneas verticales de los tallos de la zamioculca (Zamioculcas zamiifolia), guarnecidos por sus brillantes y gruesas hojas, atrapan la mirada con su aspecto de grandes plumas. Si a esto se suma que es una planta increíblemente fácil de cuidar se entiende por qué es tan habitual hoy en oficinas y casas de gente muy ocupada o con poca experiencia en el mundo verde.
Además, las zamioculcas funcionan en cualquier tipo de decoración, tanto moderna como clásica, rústica o informal: todo depende del tiesto o portamaceta que se escoja. Las hay de muchos tamaños, incluso de un metro de altura, y muy pequeñitas: las minizamioculcas ‘Zamicro’.
Mínimos cuidados
• Luz:
Lo ideal es situarla en un lugar muy luminoso pero sin sol directo, o en sombra parcial.
• Temperatura:
Como nativa de Tanzania y Zanzíbar, la zamioculca no está acostumbrada al frío. Se aconseja mantenerla a 18-22°. Agradece la humedad ambiental y las pulverizaciones frecuentes con agua tibia. En primavera y verano se la puede llevar al exterior, siempre que la temperatura no baje de 12º por las noches y permanezca resguardada de los rayos del sol.
• Riego:
Solo se la debe regar cuando el sustrato esté seco. Si hay algo que no soporta es el exceso de humedad en el suelo. En invierno bastará con pulverizarla. Sus raíces tuberosas, tallos y hojas actúan como reservorios de agua.
• Abono:
Una vez al mes debe recibir abono para plantas verdes disuelto en el agua de riego.
• Trasplante:
Si se observa que empieza a declinar es señal de que debe trasplantarse.