Tal vez tengas un
rosal con hojas amarillas
y te estás preocupando, no sabes que es lo que le ocurre, porque le ocurre, y como solucionarlo. ¿Es así?
Las hojas de las rosas son de color verde
, unas variedades de rosales tienen un verde más intenso, incluso de color rojizo en sus primeras etapas, mientras que otras variedades de rosas tienen las hojas de un color verde más claro.
También encontramos que
hay variedades de rosas, con hojas más brillantes y otras más mates.
Pero siempre, siempre, un rosal está saludable, cuando sus hojas son de color verde.
Que las hojas del rosal se tornen amarillentas, es un síntoma de que algo no funciona bien,
es una de las formas en las que el arbusto exterioriza la existencia de un problema.
Si tenemos un rosal con hojas amarillas, estamos ante un problema de salud, que puede ser debido a diferentes problemas.
Falta de clorofila
La clorofila es un pigmento verde
que es muy importante en el proceso químico, por el que las plantas absorben energía a través de la luz solar.
Cuando nos encontramos ante un rosal con hojas amarillas es porque
la fotosíntesis se está interrumpiendo
. Si la planta no se alimenta se debilita, es susceptible de contraer un mayor número de enfermedades y por último, muere.
Aunque a primera vista pueda parecer que la aparición de algunas hojas amarillas en los rosales no tiene por que ser un problema importante, nos estamos equivocando.
Si el problema continúa en el tiempo o se agrava, acabaremos perdiendo nuestro rosal o rosales.
Hay tres causas principales, por las que las hojas de un rosal se vuelven amarillas.
Debemos descubrir cual es el problema y actuar en consecuencia, lo más rápidamente posible:
Rosal con hojas amarillas, por culpa de alguna enfermedad o plaga
La mayoría de los ataques por plagas, como son los ácaros y algunas de las
enfermedades provocadas por los hongos
, tienen como objetivo hacerse con la savia del rosal.
Si la savia no circula bien, el rosal no produce la fotosíntesis y las hojas amarillean.
Por tanto, una de las causas por las que un rosal puede tener hojas amarillas, se debe a una plaga,
bien por ataque de insectos o por ataque de hongos.
Es corriente que cuando nos demos cuenta de que las hojas empiezan a cambiar de color, se están volviendo más pálidas o directamente ya son de color amarillo, es porque la plaga está en un proceso avanzado.
Cuando un rosal está siendo víctima del ataque de una plaga,
debemos intervenir con rapidez,
para impedir que se propague al resto de nuestras plantas, y para detener el proceso de deterioro lo antes posible.
Problemas con el riego
El agua es un complemento indispensable para la vida de las plantas,
una falta de agua provocará que las hojas amarilleen y se acaben cayendo.
Sin embargo,
un exceso de agua tiene un efecto similar,
ya que cuando hay un exceso de agua en las raíces del rosal provocamos la asfixia radicular.
Por las raíces, el rosal no sólo adquiere los nutrientes presentes en el suelo, también
precisan absorber agua y oxígeno.
Si el riego es excesivo
, las raíces no pueden absorber el oxígeno presente en el sustrato provocando su asfixia.
Cualquiera de los dos problemas,
la falta o el exceso de agua, son fáciles de solucionar.
Sólo debemos tener claro cual es la verdadera causa por que las consecuencias ya las conocemos: un rosal con hojas amarillas.
Deficiencias en los nutrientes presentes en el suelo
Otra de las causas por las que un rosal puede presentar un amarillamiento de sus hojas está en que
no obtiene los nutrientes necesarios del suelo, o no están presentes en las proporciones adecuadas.
Puede ocurrir que
el pH del suelo es demasiado alto (alcalino)
, o no existen los nutrientes necesarios: hierro, manganeso o zinc.
La solución es añadir los nutrientes que el rosal no encuentra en el suelo, bien de forma foliar (fumigando las hojas) o a través de productos solubles en el agua de riego.
Si el problema fuera por el pH del terreno, lo ideal es
corregir aplicando
mejoradores del suelo
.