¿ Para qué sirven los cloroplastos ? Es una pregunta esencial que suele surgir durante el estudio de los organismos vegetales para entender el proceso de crecimiento de estos. Ese tipo de orgánulos se han especializado en realizar la fotosíntesis , logrando que la luz del sol que se capta a través de la clorofila, pueda ser convertida en energía química que contribuya a la formación de alimentos necesarios para las plantas.
¿Para qué sirven los cloroplastos?
Cada orgánulo perteneciente a las células que componen a la planta, cumplen una función en específico. Y cuando se pregunta para qué sirven los cloroplastos, se sabe que están estructurados para ser capaces de realizar la fotosíntesis . A través de este proceso, es que la planta es capaz de producir distintos tipos de nutrientes que favorecen su crecimiento. Es así, como se considera un organismo autótrofo, capaz de producir sus propios alimentos, algo que no es común en organismos animales.
Este tipo de plastidio se desarrolla únicamente en la zona de las hojas, donde puede recibir fácilmente los rayos del sol, lo que permite que pueda recibir la luz necesaria para realizar todos los procesos metabólicos del organismo. Es en su interior donde ocurre la transformación de la energía solar al reaccionar con el dióxido de carbono, para lograr que se produzca energía química, la cual servirá para sintetizar compuestos orgánicos.
Otras funciones que cumplen los cloroplastos
Si bien la fotosíntesis es la función de los cloroplastos que mayormente se reconoce, ellos realizan otro tipo de procesos que favorecen a la planta. En este sentido, durante la acción fotosintética ocurre una ruptura de la molécula del agua dentro de estos orgánulos, lo que permite la liberación de oxígeno. De esta manera, otros seres vivos pueden aprovecharlo en la respiración.
Dentro de los cloroplastos existe una sustancia sobre la cual flotan el resto de las estructuras internas, se le conoce como estroma. Este fluido tiene otra función de importancia, que es servir como almacén para el almidón. Los gránulos que se forman, contienen glucosa, y al ser insolubles existe la posibilidad de que sean observados a través del microscopio.
También influye en el proceso de síntesis de biomoléculas, destacándose la asimilación de aminoácidos, sulfatos, vitaminas, ácidos grasos y otras sustancias necesarias para el desarrollo de la planta. Todo es a través de enzimas especializadas y los ribosomas. En el caso de los nitratos, su síntesis es esencial, ya que es la fuente principal de nitrógeno, un elemento de importancia para los organismos vegetales.
Por último, se destacan como orgánulos defensores. Esto se debe a que de por sí una planta no posee un sistema inmune que permita protegerla de todos los agentes externo que amenazan su salud. Los cloroplastos sirven de alerta para otras estructuras ante un riesgo inminente. Además, son capaces de producir ciertas sustancias que pueden combatir algunos patógenos.
Intervención de las partes internas de los cloroplastos en la fotosíntesis
Como sabemos, la fotosíntesis es el principal proceso que efectúan los cloroplastos para ayudar en la producción de alimentos para la planta . Pero es mediante la intervención de cada una de sus estructuras, que se logra realizar:
Tilacoides : intervienen durante la fase luminosa de la fotosíntesis. Es en estas vesículas donde se encuentra la clorofila, que es capaz de absorber la luz del sol durante el día., transformando esta energía en energía química, que será almacenada para ser utilizada durante la fase oscura. Es en esta misma estructura donde se lleva a cabo la ruptura de la molécula H2O, a través de la cual se podrá liberar el oxígeno a la atmósfera, mientras que el hidrógeno se almacena.
Estroma : este fluido entra en acción durante la fase oscura. A través de este, el dióxido de carbono se une con el hidrógeno, utilizando la energía almacenada, lo cual da como resultado la formación de compuestos orgánicos necesarios para la planta. Además, también se destaca el proceso de fijación de carbono.