Outdoor living: vivir al aire libre (2º parte)
Esta habitación al aire libre a la que tienden a convertirse jardines, terrazas y patios ha dado juego a los fans de las barbacoas a convertir al menos una parte en una auténtica cocina al exterior, eso sí, junto a una mesa donde recibir invitados y disfrutar de una cena bajo las estrellas, uno de los grandes placeres del verano.
Las cocinas al exterior son hoy todo lo completas que se desee: pueden incluir la típica barbacoa, pero también horno y plancha. Abajo, barra de bar para cócteles en la terraza; la nota verde: un olivo y matas de romero.En el Chelsea Flower Show de 1999, Terence Conran sorprendió con un ya célebre jardín, el Chef’s Garden, un huerto en torno a una cocina más una mesa para sentarse a disfrutar en un entorno cómodo, relajante y, tratándose de este pope del diseño, muy atractivo visualmente.
Ese jardín del cocinero era una cocina en toda regla. “Ciertamente, no se trata solo de tener una simple barbacoa; hoy el concepto es mucho más amplio”, sostiene Xavier Bisbe, paisajista y propietario del centro de exteriorismo Arborètum. “Dentro del outdoor living la última tendencia es precisamente esta: cocinar en el exterior”.
A ello contribuye en no poca medida la sensibilidad actual hacia la cocina con productos naturales y de calidad (“ahora me motivan los aromas: las hortalizas del huerto, recolectadas y cocinadas inmediatamente, no tienen comparación con las que se compran en la tienda”, dice Conran).
“Esto ha llevado a los diseñadores a crear espacios completos para cocinar al aire libre”, señala Bisbe. Hoy se dispone “de verdaderas y completas cocinas de exterior, que pueden incluir parrilla, plancha, quemadores, hornos, o incluso un teppanyaki japonés”. Muebles auxiliares como armarios, neveras o hasta vinotecas suman comodidad y posibilidades. “Hoy podemos tener una auténtica cocina sobre ruedas para instalarla al aire libre y recogerla en invierno”, concluye Ignacio Azurza, paisajista de Oriamendi Jardinarium.