No es la primera vez que hablamos de los geranios pero nunca está de más poner el foco en esta planta de hermosas flores que es una de las grandes elegidas de jardines y balcones.
Sabemos que los geranios pertenecen a la familia de las Geraniaceae , y que hay muchas variedades pues comprende unos 11 géneros con más de 400 especies . Los tres géneros más importantes son el Geranium, el Erodium y el Pelrgonium , este último el más cultivado en el mundo y es por ello que hoy nos dedicaremos a él.
Secretos de su cultivo
Más allá de las variedades propias del género Pelrgonium, estos geranios comparten necesidades a la hora de ser cultivados. Necesitan crecer en ambientes con temperaturas de hasta 25 °C, a pleno sol y en lugares ventilados aunque no con corrientes de aire muy fuertes. Estos geranios no soportan las temperaturas demasiado bajas , por debajo de 15 °C.
Por otra parte, necesitan de un riego regular par que la tierra se humedezca. Cuando notas que se seca es momento de realizar un nuevo riego, esto durante los meses más calurosos pues en otoño y en invierno lo mejor es regar lo justo y necesario evitando que la tierra se seque demasiado.
Cuidados
Luego de sembrarlos es importante remover la capa superior de la tierra de tanto en tanto para así eliminar la costra superficial y permitir que la planta absorba el agua correctamente además de ayudar a que el sustrato más profundo respire.
Se recomienda trasplantar los geranios cada año y siempre en primavera , renovando el sustrato y así ayudando a la planta. Al hacerlo, sacude las raíces para quitar todo el sustrato viejo y poda las raíces demasiado largas utilizando una tijera muy limpia.
Por otra parte, quita las hojas secas con una tijera justo antes de que se junten con el tallo para así no dañar a la planta y evitar el ataque de parásitos.