Tener unos preciosos rosales en el jardín es sencillo
. Es algo que puedes conseguir, siempre que sigas mis consejos basados en la experiencia.
Yo
llevo cultivando rosales desde hace varios años
. Los rosales son arbustos que siempre me han atraído por varias razones.
La primera son sus flores, las rosas.
¿A quien no le gustan las rosas?
Poder tener rosas en el jardín, incluso cortar de vez en cuando,
un ramo de rosas para el salón de casa es una maravilla.
Hay otra faceta de los rosales que también me atraía y aún me sigue fascinando, son
, que
florecen durante años.
Es posible que vayas por el campo y veas un
rosal silvestre
, o pases por una casa abandonada y veas como los rosales del jardín,
a pesar de que nadie los cuida, siguen floreciendo maravillosamente.
¿Te has preguntado el motivo?
Pues no es otro que
hacer las cosas bien desde el principio.
Vamos a obviar a la madre naturaleza, que es muy sabia, y nos vamos a centrar en los rosales en el jardín.
6 Consejos para tener unos rosales preciosos
1. Elige la variedad de tu rosal
Yo soy comprador de plantas para mi jardín, igual que tú, y que otros miles de personas que pasan por los viveros todos los años.
Mucha gente compra plantas, sin tener una idea exacta de las necesidades que tiene esa planta
, y cuando hablo de plantas, me refiero a los rosales (mis queridos rosales).
Cuando voy al vivero observo a la gente.
Compra las plantas por su aspecto o color
, en el caso de los rosales, por que tenga
rosas rojas,
rosas blancas
…sea un rosal trepador o, vamos a decir, arbustivo.
Es posible que algunos sepan las necesidades del rosal que compran, pero otros no tienen ni idea.
En el mercado hay miles de rosales, pero en el vivero sólo vamos a encontrar ¿Una decena?
No voy a entrar a enumerar rosales concretos, ya que cada uno tiene sus propias características, pero si tenemos una
clasificación de rosales
, que nos ayudan a decidir que rosal es el mejor para nuestro jardín, en función del propio jardín o la ubicación que le queremos dar:
rosales trepadores, arbustivos, de patio, rosales miniatura, cubresuelos…
Esta es la primera decisión que debemos tomar
¿Dónde voy a poner mi rosal?
. Si quiero cubrir una pared, debe ser un rosal trepador y no uno arbustivo.
Si mi jardín es pequeño, lo mejor es un
rosal de patio
, que tienen un porte más pequeño.
Luego entraríamos en detalles secundarios, como el color de las rosas, si es más o menos resistente a las enfermedades, cuanto puede crecer, ¿Florece mucho?
2. Elegir bien la ubicación
No todos los rincones de nuestro jardín son adecuados para colocar un rosal.
Es muy habitual ver rosales que están en medio de un prado de césped.
El césped suele asfixiar a los rosales,
y les impide crecer de forma correcta. En estos casos, lo ideal es dejar un buen perímetro alrededor del arbusto, para que las raíces del césped no influyan en su crecimiento.
Este sólo un ejemplo de una mala elección.
El lugar ideal para sembrar un rosal debe ser:
- Un lugar con sol directo, o en el que al menos reciba 6 horas diarias de sol.
- En lugares con climas con calor extremo, deberían tener algo de sombra durante el día. En sitios muy fríos se deben plantar cerca de un muro que les proteja del frío , pero que no les quite sol.
- El terreno tiene que tener un buen , y también tiene que ser fértil. Si es necesario deberíamos mejorar el terreno, añadiendo arena o compost.
- No debemos plantar rosales debajo de árboles o arbustos, con los que competirá por el sol y los nutrientes.
-
Los
rosales trepadores
necesitan de un soporte al que debemos sujetarlo
. Habitualmente se colocan contra las paredes, pero no todos los rosales trepadores están bien contra una pared.
La razón es que la circulación del aire es mala, y pueden ser atacados por hongos, a los que les encanta las zonas calurosas y húmedas …como ocurre cerca de las paredes.
3. El terreno y el abono
Para plantar rosales
necesitamos cavar un hoyo suficientemente profundo en el jardín.
El hoyo debe contener perfectamente las raíces del rosal. La medida es fácil de obtener si vamos a plantar un rosal con maceta o cepellón, pero no nos debemos dejar engañar con los rosales a raíz desnuda, el hoyo también tiene que tener un buen diámetro.
Yo suelo
incorporar en el fondo del hoyo un buen compost cuando es un rosal en maceta,
y cubro todas las raíces con estiércool bien maduro, cuando es a raíz desnuda.
En este último caso,
es importante que el
punto de injerto
quede bien protegido para el invierno
. Debes hacer un montículo alrededor del rosal, de manera que quede perfectamente protegido.
Si el rosal es a raíz desnuda, te recomiendo ponerlo en un cubo de agua la noche previa a la siembra, para que el arbusto se hidrate bien, ¿Por qué? Pues porque no sabemos el tiempo que hace que lo sacaron de la tierra, y lo más probable es que necesite una hidratación extra.
En los rosales en maceta es aconsejable aflojar un poco la tierra del cepellón,
para facilitar el crecimiento de nuevas raíces.
Esta variedad de arbustos suele estar disponibles de octubre a marzo, y se deben plantar entre otoño y primavera.
Si decidimos
comprar rosales por Internet
, lo más probable es que nos las sirva a raíz desnuda, y
sólo estarán disponibles durante determinadas fechas del año,
aquellas que coinciden que las adecuadas para ser sembradas.
La mejor época siempre es otoño o primavera.
Cuando sembramos en otoño, la tierra aún está caliente, y favorece la aparición de nuevas raíces.
Si hace demasiado frío o el suelo está helado, corremos el riesgo de que nuestro nuevo rosal se hiele, o no desarrolle adecuadamente.
En cuanto al
abono de los rosales
.
Ya te he comentado que cuando plantes rosales en el jardín, el hoyo en el que se vayan a poner tiene que contener un buen aporte de compost o estiércol maduro.
Esta es muy buena idea, porque las raíces cuando se empiecen a extender y el rosal comience a absorber los nutrientes del suelo, tendrá más que de sobra.
Pero posteriormente
hay que seguir un programa de abonado,
para que el rosal crezca sano y fuerte, además de que nos ofrezca una buena floración.
Los mejores abonos de finales de invierno y comienzo de la primavera, son los de materia orgánica: compost, estiércol, guano, humus de lombriz…
ayudan a que el rosal encuentre el nitrógeno necesario para crear nuevos brotes,
después de la poda.
Cuando estamos en plena temporada de floración,
lo ideal para tener rosas sin parar, es utilizar un abono rico en potasio y bajo en nitrógeno.
Estos abonos “químicos”, mejoran la floración y evitan la aparición de plagas molestas, como son los pulgones.
4. El riego
En el primer año del rosal en el jardín, tenemos que tener una especial atención al riego.
Las raíces de los rosales son muy profundas cuando son arbustos adultos. Este crecimiento vertical, se puede explicar por la necesidad de encontrar agua para su pervivencia.
Por eso podemos ver un rosal abandonado que sigue floreciendo, a pesar de que nadie lo cuide. Con toda seguridad, su sistema radicular sea enorme.
Durante sus primeros años, las raíces no están desarrolladas completamente
y debemos evitar que el terreno circundante se seque por completo.
Lo mejor es
regar de forma abundante dos o tres veces en semana,
aunque también sería perfecto tener un riego automático.
Los rosales no llevan bien los extremos,
ni que el suelo se quede completamente seco, ni que esté anegado
y no puedan respirar…(si, también respiran por las raíces).
5. La poda
A veces, cuando voy paseando por la calle y veo rosales recién podados en algunos jardines, siento verdadera lástima por ellos.
Las podas a las que son sometidos, son casi una tortura.
Para que los rosales crezcan sanos, se deben podar todos los años.
La poda evita el ataque de los hongos, y
estimula a la planta para que produzca nuevas ramas y a su vez, nos ofrezca una buena floración
.
Pero eso no quiere decir que tengamos que cortar los rosales y dejar un muñón.
Cada variedad de rosal necesita una poda diferente
. Por ejemplo,
la poda en los rosales trepadores
tiene como objetivo mantener el arbusto dentro de un orden, pero en los rosales tipo arbusto, necesitamos que el aire y la luz llegue al centro de la planta, para evitar la aparición de plagas.
Como norma, para los rosales tipo arbusto,
se deben cortar sus ramas en dos tercios de su longitud.
Hay que retirar las ramas muertas, las dañadas, las débiles y orientar los cortes hacia el exterior, siempre por encima de una nueva yema.
6. Plagas y enfermedades
Disfrutar de las rosas en el jardín, no tiene precio, pero si requiere de un gran esfuerzo.
Los rosales constantemente están en riesgo.
Pueden ser atacados por plagas de insectos
, el más persistente y molesto es
el pulgón
, pero también puede ser víctima de los hongos, sobre todo en primavera.
El ataque de hongos lo podemos eliminar en un porcentaje muy alto
si: elegimos bien la variedad, colocamos el rosal en el lugar correcto del jardín, abonamos bien y podamos siguiendo mis instrucciones.
Con todo, es posible que los hongos se presenten, sobre todo en primaveras lluviosas y calurosas. En ese caso,
debemos eliminar las partes afectadas del rosal
y retirarlas rápidamente del jardín, para a continuación aplicar un fungicida adecuado.
Para las plagas de los insectos, tendría que saber exactamente que plaga es la afectada, porque no es lo mismo el pulgón, que la araña roja o la babosa del rosal.
No te preocupes,
para ayudarte a solucionar cualquier plaga que pueda afectar a tus rosales, he creado una guía
, que te ayudará a identificar y tratar todas las que afectan a los rosales:
plagas y enfermedades de las rosas
.
Plantar un Rosal a raíz desnuda, en maceta o cepellón
En el mercado y por Internet, podemos encontrar tres formas de presentación para un rosal: maceta, raíz desnuda y cepellón.
La ventaja de los rosales a raíz desnuda sobre todo es el precio,
son más baratos. Pero también tienen otra gran ventaja,
puedes comprar rosales por Internet de cualquier parte de Europa
(no se si del mundo, por temas de especies y demás).
Esta ventaja es genial, sobre todo para aquellos que nos gusta mirar los catálogos de otoño,
planificar que rosales nuevos vamos a comprar
…es todo un sueño.
Estas son las diferencias entre unos y otros:
-
En maceta.
Están cultivados en una maceta. Tienen un buen sistema radicular que se ha creado dentro de la maceta.
Las rosas cultivadas en maceta, se pueden sembrar durante todo el año, con la única precaución de elegir fechas en las que no existan heladas. -
A raíz desnuda.
Suelen estar disponibles de noviembre a febrero.
Se les cultiva en campos, donde son recolectados y mantenidos en un proceso parecido a la hibernación.
Lo ideal es sembrarlos durante el otoño en días libres de heladas, y en su defecto, en primavera, nunca en verano. - En cepellón. Es la forma menos habitual de encontrar rosas. Muchas veces, hay rosales que se presentan en maceta, pero son de cepellón. Se les mete en maceta para ser más fáciles de transportar.
Como plantar rosales en macetas
Aunque no difiere en exceso, plantar rosales en el jardín y hacerlo en maceta, esta última opción tiene sus particularidades propias.
En ocasiones, nuestro jardín no tendrá el tamaño adecuado o el lugar idóneo para tener un rosal
y que este se desarrolle bien. Tal vez la exposición al sol de nuestro rincón para plantas no sea bueno, o tenemos problemas de encharcamiento que son difíciles de solucionar.
Para estas situaciones,
podemos acudir a plantar rosales en maceta.
La gran ventaja de plantar rosales en maceta, es que
podemos tener color al instante en nuestro jardín
, sobre todo si compramos rosales en plena floración.
Otra gran ventaja es que podemos elegir dónde colocar nuestras rosas,
trasladarlas
para que tengan más sol o protegerlas en el invierno,
para que no sufran riesgo de heladas.
Elegir las rosas adecuadas para plantar en macetas
Lo primero que debemos hacer, es elegir las rosas adecuadas para macetas.
Aunque
muchos rosales admiten ser plantados en maceta,
lo ideal es elegir arbustos de porte bajo, como son los
rosales de patio o los
rosales de pitiminí
.
Estos rosales tienen un sistema radicular acorde con su altura, óptimo para estar en maceta.
Los demás rosales, aunque puedan estar en maceta, el crecimiento será mucho menor que si estuviera en el jardín, obtendremos menos rosas, estas serán mas pequeñas y el rosal siempre tendrá un aspecto un poco raquítico.
Elegir la maceta adecuada para plantar rosales
Un error que podemos cometer al plantar rosales en macetas, es
una incorrecta elección del recipiente.
El material no tiene demasiada importancia, aunque
soy partidario de las macetas de barro,
por estética y por qué a pleno sol son
las mejores macetas para las raíces
(no se cuecen como con el plástico), reconozco que si tenemos que mover de vez en cuando nuestro arbusto de rosas, el peso del recipiente es un aspecto a considerar.
Lo más importante de una buena
maceta para rosales
es su profundidad. No debe ser inferior a 35 cms, las raíces de los rosales tienden a crecer mucho en profundidad, y no se extienden tanto hacia los lados.
Compost y abono adecuado
Una vez elegida la variedad de las rosas y la maceta,
un buen compost forma parte indispensable del éxito.
Debemos rellenar la maceta con
compost adecuado para rosas
, y además, cuando estamos realizando la siembra, añadir un abono adecuado.
Yo elegijo un abono a base de guano, ideal para rosas en macetas.
Si compramos un arbusto de rosas en maceta, presionaremos un poco las raíces, para estimular su crecimiento.
Apretamos bien el compost alrededor, para que la planta no se caiga y a continuación
regamos bien, para eliminar burbujas de aire que pudieran haber quedado en la maceta.
Siguiendo estos consejos, tendrás unos maravillosos rosales durante muchos años.