Cactus

El cultivo de las plantas Suculentas no es complicado y es por eso que muchos eligen tenerlas en sus jardines.  No obstante, siempre hay que saber lo que necesita cada especie. Cuando vayas a comprar la planta, es necesario inspeccionarla muy bien por si tiene pudriciones algodonosas en la raíz.

Si deseas sembrar tus cactus en el exterior o en una terraza, puedes hacer una pequeña colección con más de 100 especies pequeñas y tienes que considerar que no haya riesgo de heladas. Es mejor que durante el invierno estén en un lugar fresco y luminoso.

En caso de que las vayas a sembrar para el interior, puedes ubicarlas en el lugar más luminoso posible: ventanas mirando al sur de preferencia ya que los cactus en zonas oscuras crecen larguiruchos. No es aconsejable exponerlos de golpe al sol porque pueden sufrir quemaduras así que hay que dejar que se vayan aclimatando poco a poco.

Para abonar a estas especies, debe hacerse en primavera y verano con pequeñas cantidades. Para ello hay fertilizantes especialmente formulados para cactus y suculentas . También puedes utilizar un fertilizante de lenta liberación. En este caso, aplica sólo una vez al año, en primavera.

Por otro lado, los cactus deben cambiarse de recipiente o maceta solo cuando lo necesiten, sin seguir una planificación fija. Para sembrar cactus , hay que considerar los recipientes pequeños para evitar excesos y acumulaciones de agua y deberás esperar algunas semanas antes de regarlo para que las raíces estén sanas y fuertes.
Los principales enemigos de los cactus y suculentas son los hongos que salen por exceso de riego. Los insectos y plagas que más afectan a los cactus se encuentran los pulgones, los ácaros (Araña roja) y las Cochinillas.

Más información – Plantas Seculentas, resistentes a la falta de riego

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