Un Bonsái es un árbol que, además de crecer y vivir en una bandeja, está siendo trabajado a lo largo del año para mantener un estilo y una forma definidos. Para ello, el bonsaísta o su cuidador tiene que ir podándolo de tanto en cuando, ya que de lo contrario las raíces, especial la pivotante, llegarán a sacarlo literalmente del recipiente.
La planta tiene las raíces que necesita, ni más ni menos. Cuantas más ramas tenga, más necesitará, por lo que su sistema radicular será mayor. Por lo tanto, es muy importante mantener su crecimiento controlado. Pero, ¿sabes cuándo se poda un Bonsái?
Para trabajar un Bonsái debemos de saber que existen dos tipos de poda, que son:
Poda de mantenimiento o pinzado
Con esta poda lo que se pretende es mantener el estilo y forma del árbol. Es la que tenemos que hacer si ya hemos comprado un Bonsái más o menos trabajado, o un proyecto de Bonsái (que es lo que se venden en la mayoría de viveros). Estos árboles ya tienen un estilo definido, de modo que sólo tendremos que ir recortando aquellas ramas que se sobresalgan de dicho estilo .
¿Cuándo se hace? A lo largo de todo el año . Pueden utilizarse tijeras, pero en el caso de las coníferas es mejor hacerlo con los dedos ya que sólo tenemos que quitarles los brotes más nuevos.
Poda de formación o modelado
El objetivo de esta poda es la de darle forma al futuro Bonsái . Es la más difícil, ya que hay que decidir bien qué ramas son necesarias y cuáles hay que eliminarse. En caso de duda, hay que observar la planta, mirar su tronco, el movimiento que tiene, si crece más en forma vertical o si por el contrario parece que sus ramas quieren tocar el suelo.
La poda de formación se debe de hacer a finales de otoño a comienzos de primavera , teniendo en cuenta algunas cosas para que el trabajo sea excelente:
- Se han de quitar aquellas ramas que crezcan hacia delante, en especial aquellas que oculten el tronco.
- Si hay dos ramas que crezcan más o menos a la misma altura, hay que eliminar una.
- Se han de recortar aquellas ramas que hayan crecido en exceso.
- Se han de eliminar las ramas que den giros antinaturales.
Así, podremos estar seguros que de tendremos un árbol sano y bien formado 🙂 .