8. El confort de los ambientes de interior toma el exterior

El jardín, la terraza, el patio ya no se entienden como algo separado del resto de la casa, sino como una habitación verde, integrada, convertida en una estancia funcional para hacer vida, reunirse con amigos, cocinar y comer, o para un chill out. Pero para ello, este salón al aire libre debe ser provisto de comodidades y guiños de estilo: muebles de calidad, que incorporan diseño, soportan la intemperie y envejecen bien; alfombras de exterior, tan decorativas como resistentes y fáciles de limpiar; detalles decorativos bien seleccionados, que personalizan e incluso ayudan a redefinir el espacio, tales como tiestos, faroles, veladores, cestas colgantes, jaulas para pájaros, tipis y hamacas (¡tan de moda!), daybeds y tumbonas... Para aprovechar incluso los días y noches más frescos, chimeneas de exterior y braseros, con la siempre seductora presencia del fuego. Pero no hay que olvidar las plantas: “Para el alma, tanto como para el estilo, un jardín moderno debe tener muchas plantas”, sostiene la paisajista Charlotte Rowe (la entrevistamos en hemeroteca online); “no obstante lo fabulosos que sean el suelo y los detalles, un outdoor room será un espacio frío a menos que haya una diversidad de plantas que cambien con las estaciones”. Más info en ‘Outdoor living’: vivir al aire libre.

9. Una verdadera cocina al aire libre

Los espacios para cocinar en el exterior se sofistican: ya no es solamente tener una barbacoa, sino una verdadera y completa cocina, que puede incluir parrilla, plancha, horno, incluso un teppanyaki japonés, y contar con un fregadero anexo, nevera, botellero o vinoteca, armarios auxiliares... Con una mesa de comedor al lado, donde servir inmediatamente la comida, se convierte en un delicioso lugar de disfrute y buena compañía.

10. La revolución luminosa

La tecnología led y la fibra óptica consumen menos energía y a la vez proporcionan nuevas alternativas en la decoración nocturna de las zonas verdes, ya sea en el alumbrado como en tiestos y muebles retroiluminados: el efecto resulta espectacular, como en la foto de arriba. La regla principal: no sobreiluminar el espacio, utilizar con discreción las luces de colores, destacar los elementos verticales y estructurales iluminándolos hacia arriba.

Pero que las innovaciones no hagan olvidar el detalle cálido de las velas, faroles y antorchas, recursos que nunca pasan de moda.

11. Los juegos de agua no dejan de renovarse

Ver columna de la derecha.

12. Menos césped clásico (pero con alternativas)

Dentro de la jardinería, el césped es la plantación con mayores exigencias de agua y, por tanto, una de las prácticas menos sostenibles. Pero ya que resulta difícil renunciar a la alfombra verde, la jardinería actual proporciona varias alternativas. En los centros de jardinería encontrarás variedades de cespitosas que precisan menos riego y soportan mejor el calor extremo, muy apropiadas para los climas del centro y la costa mediterránea, las áreas climáticas más exigentes (consulta Céspedes más sostenibles ). Pero también céspedes artificiales de alta calidad, cada vez más parecidos al natural y más fáciles de instalar. Además, se pueden usar tapizantes, plantas de flor incluso, o áridos.

13. Vivaces + gramíneas, la fórmula de moda

Ver columna de la derecha.

14. Estanques-piscina, un híbrido con sello ‘bio’

Entre un estanque y una piscina y con lo mejor de ambos: las biopiscinas combinan la zona de natación con un área llana donde las plantas crecen y ejercen de purificadoras del agua, de forma biológica, sin necesidad de productos químicos. Sus ventajas convencen cada vez más a los que buscan un paisaje anfibio de charca natural, pero sin renunciar al lujo de una piscina con todas las garantías higiénicas. No es necesario cambiar el agua en todo el año, simplemente reemplazar la que se evapora en los meses de verano para que la vegetación acuática de las orillas no se seque. Más info en Estanques-piscina: un lago en casa.

15. Tecnología ‘inteligente’ al servicio de los espacios verdes

Sistemas se riego automático con detectores de humedad para ahorrar agua, robots cortacésped de última generación, que siegan de forma autónoma (¡un trabajo menos!), equipos de sonido para exteriores, ideales para las zonas de chill out... e incluso incorporados a los muebles y funcionan en conexión con un smartphone o por Bluetooth. La alta tecnología, llamada a hacer más confortables los espacios exteriores, también se prodiga en los nebulizadores de alta presión, cada vez más eficaces, que proyectan una niebla microscópica que no moja pero permite reducir varios grados la temperatura del jardín, la piscina o la terraza en los meses más calientes del año (si quieres saber más, lee Nebulizadores: refrescante niebla de verano ).